Dos días después de los bombardeos estadounidenses contra instalaciones nucleares iraníes, Costa Rica rompió el silencio y abogó por una “solución pronta y sostenible” al conflicto en Medio Oriente.
El Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (MREC) se refirió este lunes al ataque del sábado como un “aumento de tensiones” en la región y evitó señalar directamente a los involucrados.
Mediante un breve comunicado, la Cancillería pidió “a las partes” recurrir a la diplomacia y evitar nuevos enfrentamientos, como los que desde el 13 de junio pasado protagonizan Israel e Irán.
“Las recientes escaladas militares ponen en riesgo a miles de civiles, así como la paz y seguridad en la región y el mundo entero.
“Costa Rica reitera sus principios históricos de política exterior a favor de la solución pacífica de controversias, el desarme y la no proliferación nuclear, lo que es aún más urgente en regiones donde impera la inestabilidad geopolítica”, indica la nota de prensa.
Israel lanzó este lunes nuevos ataques aéreos contra Irán, que a su vez amenazó a Estados Unidos con “graves consecuencias” por los bombardeos del sábado y advirtió de una posible “extensión de la guerra” en Oriente Medio.
El conflicto entre las partes, desencadenado por un ataque israelí sin precedentes contra su gran rival regional, llegó este lunes a su undécimo día.
Estados Unidos entró en los enfrentamientos con bombardeos a las instalaciones nucleares de Isfahán y Natanz así como la planta subterránea de enriquecimiento de uranio de Fordo.
El Pentágono afirmó haber “devastado el programa nuclear iraní” pero el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, declaró que de momento no es posible evaluar el alcance de los daños.
Grossi también pidió acceso a las instalaciones nucleares iraníes para evaluar sus reservas de uranio altamente enriquecido, cercano al umbral que permite fabricar una bomba atómica.
Precisamente, para justificar su arremetida, Israel sostiene que Irán estaba a punto de fabricar una bomba atómica. Sin embargo, Irán niega querer fabricar armas atómicas, pero defiende su derecho a desarrollar un programa nuclear civil.
En estos 11 días, la guerra ha dejado más de 400 muertos y 3.056 heridos en Irán, la mayoría de ellos civiles, según un balance oficial. Por su parte, el fuego iraní contra Israel ha matado a 24 personas, según las autoridades israelíes.