
Esta mañana, un incendio estructural en la comunidad de Miravalles, Curridabat, ha llevado a la intervención del Cuerpo de Bomberos y diversas instituciones gubernamentales, incluido el Ministerio de Salud. Este incidente ocurre en medio de un desalojo que afecta a aproximadamente 140 familias que habitan en la zona.
El incendio, que consumió por completo una vivienda de 60 metros cuadrados, se desató en un área de difícil acceso. Los bomberos lograron controlar el fuego tras un ingreso complicado de 200 metros. Hasta el momento, se han reportado solo daños materiales.
Durante el desalojo, que se notificó a los residentes hace tres meses, se han producido tensiones entre las autoridades y los vecinos. Un habitante afectado expresó su frustración, señalando que los oficiales han utilizado un lenguaje ofensivo. “No es justo que un oficial venga a ofendernos”, comentó, mientras describía las difíciles circunstancias de su familia.
Varios vecinos han denunciado que las autoridades no han cumplido con promesas de reubicación, afirmando que el apoyo económico recibido no es suficiente ante el aumento de los alquileres en la zona. “Los alquileres han subido de 100,000 a 300,000 colones”, lamentó otro residente.
El Ministerio de Salud ha señalado que el desalojo se justifica por el riesgo de deslizamientos en la zona debido a las fuertes lluvias. Se espera que en horas de la tarde se emita un comunicado oficial con más detalles sobre la situación.
La comunidad de Miravalles, que enfrenta este desalojo masivo, exige respuestas y una solución adecuada que garantice su bienestar.