
En la última sesión de la Comisión de Asuntos Hacendarios, se desató una intensa polémica tras la aprobación del Fondo Especial para la Educación Superior (FEES) que, según varios diputados, se llevó a cabo bajo un contexto de desconfianza y traición entre las diferentes fracciones legislativas.
Contexto de la Aprobación
El diputado Eli Fein, de la fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), expresó su decepción tras la votación, señalando que ya no podía confiar en las decisiones de sus colegas. Según Fein, existía un acuerdo previo entre los diputados para mantener una proporción justa en la distribución de recursos, favoreciendo a las escuelas y colegios en lugar de aumentar el presupuesto destinado a las universidades.
Las Declaraciones Clave
Fein afirmó que la ruptura del acuerdo se originó cuando los diputados votaron a favor de una moción que aumentaba el FEES al 2%, lo cual contravino las expectativas iniciales de limitar el incremento al 1%. Según el diputado, esta decisión afecta directamente a la educación básica, que ya enfrenta serios problemas de financiación.
Por su parte, la diputada Pilar Cisneros, también del PLN, denunció que la decisión fue el resultado de una «traición», enfatizando que el aumento a las universidades perjudica a las escuelas y colegios, que necesitan más recursos en un contexto de crisis fiscal. “Cuanto más se le da a las universidades, menos se le da a la educación básica”, argumentó.
Reacciones desde la Oposición
A pesar de las críticas, la fracción del Frente Amplio, a través del diputado Jonathan Acuña, defendió la aprobación del 2%, señalando que el proceso fue transparente y que había múltiples mociones sobre la mesa. Acuña subrayó que la educación superior también necesita apoyo y que la moción fue votada por mayoría.
El diputado criticó las afirmaciones de «traición», sosteniendo que las decisiones tomadas fueron parte de un proceso democrático donde se busca lo mejor para todos los sectores de la educación.
Conflictos Internos y Acuerdos Rotos
La falta de confianza entre los diputados se ha incrementado debido a las negociaciones que se realizaron “a espaldas” de algunos miembros, según Fein. El legislador destacó que esto crea un clima de incertidumbre que dificulta futuras colaboraciones en la asamblea legislativa. “¿Con qué seguridad puedo negociar si al final se rompen los acuerdos?”, se cuestionó.
Conclusiones y Futuras Acciones
A pesar de la controversia, algunos diputados consideran que aún es posible revisar el presupuesto y volver a un acuerdo más equilibrado. Sin embargo, otros advierten que los mecanismos necesarios para hacerlo son complejos y políticamente inviables en este momento.
La discusión sobre el FEES continúa generando reacciones encontradas en el ámbito político y educativo, dejando claro que la lucha por una distribución equitativa de recursos es un tema crítico en la agenda legislativa actual.