San José, Costa Rica – 19 de agosto de 2024
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) está llevando a cabo una exhaustiva investigación tras el robo de bienes de alto valor en una bodega del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD). El incidente ocurrió la noche del domingo en las instalaciones ubicadas en San José, donde varios individuos irrumpieron en la bodega tras golpear y reducir al guarda de seguridad.
Entre los objetos sustraídos se encuentran dos vehículos de alta gama marca BMW – un modelo 745 color blanco y un X6 color gris – así como una motocicleta BMW de cilindraje 1200 en colores amarillo y negro. También se reporta el robo de una motocicleta marca Honda color blanco, una caja fuerte con diversas joyas, bicicletas de alta gama, pantallas de televisión, drones, jackets y botas de motocross. La magnitud del robo ha generado gran preocupación, dado que estos bienes pertenecen a casos de decomiso relacionados con el crimen organizado y suelen ser gestionados o subastados por el ICD.
Las autoridades han señalado que el robo se realizó de manera sofisticada, ya que los vehículos y otros bienes de alto valor fueron extraídos de una bodega sin rampas adecuadas, sugiriendo el uso de mecanismos especiales para el traslado de los objetos. La falta de un sistema de seguridad adecuado en la bodega ha sido un tema de discusión tras el incidente.
El OIJ ha lanzado un llamado a la ciudadanía para que colabore con cualquier información que pueda llevar a la recuperación de los bienes robados. Los vehículos y otros objetos sustraídos están siendo activamente rastreados.
Sentencia por Asesinato de María Taxan Gulati
En otros temas judiciales, el Tribunal de Heredia ha dictado una sentencia de 35 años de prisión para un médico acusado del asesinato de su esposa, Doña María Taxan Gulati. La condena se emite tras un segundo juicio, luego de que el médico hubiera sido absuelto en un primer juicio debido a dudas en la evidencia.
La Fiscalía y la familia de la víctima argumentaron que se trató de un femicidio, apoyados por pruebas como la presencia de lidocaína en la sangre de la víctima y un disparo en su cabeza. Además de la pena de prisión, el condenado deberá pagar una indemnización de aproximadamente 64 millones de colones por el daño causado.
La decisión ha sido recibida con alivio por la familia de la víctima y otras personas afectadas por el caso, quienes consideran que se ha hecho justicia.